El embarazo
Las gotas golpean el cristal mientras en la silla de ruedas la anciana absorta en sus recuerdos, mueve las agujas de tejer con la ligereza que sus años le dejan. Está tejiendo un nuevo jersey para su pequeño bisnieto, aún no nato. Ese niño sin saberlo ni pretenderlo ha revolucionado toda la familia. El embarazo de su nieta, una niña que ya no era tan niña. La noticia cayó en la familia como un meteorito en medio de la capital de Japón. Todo eran gritos y manos volando sin llegar a puerto. La pequeña estaba embarazada. La inocente Irene, la niña pequeña de la familia. ¿Cómo ha podido ocurrir? Irene tiene la cara roja de vergüenza y de rabia. Ella sabe bien que lo que le ha sucedido no es normal. ¿Cómo explicarlo? Ella jugaba y nada más. El día en el que el juego le dolió se negó a seguir. Ese día el juego terminó, pero no pasaron muchos días sin que el jugador regresase. Ya no era divertido. A ella ese juego ya no le gustaba, aunque sí quería lo que a cambio recibía. Nunca había tenid